Francisco De Narváez recorrió tres populosas barriadas de Lomas de Zamora repitiendo lo que ya es un sello personas en su forma de hacer campaña: escuchar uno por uno los reclamos de los vecinos que salen a la calle a saludarlo.
Junto al concejal Gabriel Mercuri, que oficio de anfitrión, el diputado nacional visitó primero la Capilla Maria Rosa Mística, en Llavallol. Desde allí se traslado, caminando por calles de tierra hasta otros de los barrios de la localidad, acompañado por otros concejales del distrito y la diputada provincial María Elena Torresi.
De Narváez no recibió por parte de la gente demandas de índole nacional ni provincial, sino de estrictas necesidades municipales: asfalto, cloacas, centros sanitarios, iluminación.
Gabriel Mercuri fue el encargado de tomar nota y de incorporar las inquietudes al programa Mercuri te Escucha donde justamente se agilizan los reclamos por intermedio del Concejo Deliberante. “No somos el ejecutivo, no estamos a cargo de la intendencia, pero vamos a hacer todo lo que esté a nuestro alcance para desde nuestro lugar colaborar con los vecinos”.
“Todos ustedes merecen un lugar mejor para vivir, sin restos de autos abandonados, bocas de tormenta sin tapas, arroyos contaminados”, afirmó De Narváez ya en el tercer punto de encuentro: el Centro de Participación “Sentir lo nuestro”, en Villa Centenario.
Desde su sede se inició una nueva caminata por las cuadras del barrio hasta el Cementerio Israelita, luego de sortear un basural de una cuadra con el cadáver de un caballo incluido.
“No ha habido un coordinación real para combatir la inseguridad, y es por eso que hoy la ventaja la tienen los que han decidido violar la ley, mientras los que están bajo riesgo son los vecinos”, aseguró el legislador y agregó: “No hay que administrar la inseguridad, hay que terminar con ella”.
